Las sales de Schüssler son sales preparadas en diluciones para mejorar la salud de nuestros tejidos, y resultan especialmente útiles para problemas de la piel, uñas y huesos. Además, contribuyen a la recuperación de lesiones, a mejorar problemas musculares y nerviosos, y favorecen la excreción de sustancias nocivas.

Estas sales fueron conocidas gracias al Dr. Schüssler, que comenzó a medir su presencia en cada uno de nuestros tejidos. De esta forma, descubrió las 12 sales principales de nuestro organismo y, gracias a sus estudios se crearon las sales de Schüssler.

En un primer momento se presentaron en forma de pastillas, como una solución muy eficaz (y sin efectos secundarios) para niños, adultos y personas de la tercera edad que quisieran ayudar a su organismo a compensar alteraciones en la distribución y absorción de los minerales. Actualmente, podemos encontrarlas también en aplicaciones cosméticas.